El Sábado 21 a las 5 am salimos de Rosario Mónica (mi mujer) La Rangerita (la Otra) y quien suscribe rumbo a San Fernando del Valle de Catamarca adonde llegamos sin novedad alrededor de las 15 y con 37º a la sombra. Fuimos a la oficina de turismo a recabar algo (muy poco) de 
información, comimos algo en un barcito y partimos para la Cuesta del Portezuelo (la de la 
canción, la tienen? la de los mil distintos tonos de verde con un pueblito aquí otro mas 
allá y un camino largo que baja y se pierde siempre y cuando lo estés mirando desde arriba. 
Bueno la Cuesta del Portezuelo es el camino largo).
Acá la tienen.


Bajamos y pusimos proa al oeste para huir un poco de la ciudad.
Hicimos noche en la hostería de un pueblito muy pintoresco llamado Concepción.



El domingo por la mañana empezó la verdadera carrera... 
Así se sucedieron Chumbicha, Pomán, Rosario de Colana, Mutquin, Rincón, Andalgalá (donde 
almorzamos a la vera de un arroyo), despues siguieron Belen y Londres (Londres en 
Catamarca?? si)




En Londres hicimos un desvío por la Cuesta de Zapata, en la oficina de 
turismo nos habían dicho que estaba intransitable pero resultó ser que no solo estaba 
bastante bueno si no que ademas tiene unos paisajes hermosos. Son 60 kilómetros de ripio y 
piedra y se nos estaba hciendo tarde así que decidimos dormir en la montaña en un claro 
cerca del camino. Riquísima polenta y la lluvia nos apuró a meternos en la carpa (Que lindo 
dormirse con el ruido de la lluvia en la carpa. Que feo dormirse pensando espero que no siga 
lloviendo así porque de acá no salimos nunca mas).


Por la mañana seguía lloviendo pero esto no hizo mas que agregar un poco de emoción al viaje. Levantamos campamento como pudimos y salimos para Tinogasta

 
 
de ahí a Anillaco (eso no era en la Rioja??? Si pero en Catamarca 
hay otro) en lo que se conoce como la ruta del adobe por la cantidad de construcciones que 
pueden verse en este material, muchas muy bien restauradas o mantenidas y otras tantas 
nuevas.






Terminamos el recorrido del día en Fiambalá donde visitamos el Museo del hombre, chiquito 
pero con un ala muy interesante dedicada a "los seismiles".
Dormimos en una cabaña cerca de las termas de Fiambala y a las 9 de la mañana del Martes 
partimos para el lado del paso San Francisco.






Hicimos unos 80 kilómetros de asfalto y nos agarró la abstinencia de tierra, ripio y piedras 
así que nos metimos en la senda que va a la base del Volcán Pissis (en la oficina de turismo 
nos dijeron que no se podía hacer sin guía. Mirá como me río de janeiro. Está toda 
perfectamente marcada, si querés la hacés sin GPS).
Se pasan los 4500 msnm, los colores de las montañas, la fauna, el silencio, las lagunas y la 
inmensidad son un deleite constante para los sentidos. 









Hasta el Pissis son 85 kms. y la hora nos jugaba muy en contra así que llegamos hasta la laguna Las Tunas y nos pegamos la vuelta 
derechito y sin chistar hasta Villa Quilino (en Córdoba. Llegamos a las 23:30. Si, estuvimos 
arriba de la chata 14 horas ininterrumpidas).
Dormimos en un hotelucho de mala muerte, nos levantamos y el Miércoles a las 15 hs. 
estábamos de nuevo en casita.
3016 kms. 53 horas con el culo en la camioneta. Que bueno tener una mujer con la misma falta 
de jugadores que uno!!!
Saludos
FLP